jueves, 19 de enero de 2012

Aspartámides de Sacaronia

Aspartámides de Sacaronia, o Aspartámides el viajero, (428 a.C.-347 a.C.), discípulo de Platón, sobrino de Pericles (el famoso Pericles de los palotes), y compañero de padel de Homero. Fue un reputado cronista, historiador, viajero, filósofo, médico y practicante del griego, del francés y del thailandés.
    Nació en Sacaronia (Chorrentioquia) hijo de un profesor de conducción de carros mulero, ya desde su niñez filosofante talentoso, aprendió la profesión de su padre, pero lejos de hacer lo mismo que él,  se fugó con el carro de la autoescuela (identificable por llevar un recuadro con la letra "landa" en la parte trasera), para conocer el mundo y a los sabios. 
    Algunos detractores afirman que simplemente huyó del lugar para evitar casarse con Laudémona, hija de Anaclostes el cabrero, la cual por exceso de filosofar conjuntamente con Aspartámides quedó preñada de alguna suerte de sofisma el cual fué parido al cabo de nueve meses con el título de "Metaphisica penaltyai primeo", con tres kilos, trescientos cincuenta gramos de peso y un helénica cabellera rubia. Desde entonces, se cuenta, Anaclostes con su honda, expulsaba del pueblo a golpe de pedrada a cualquier cosa que pareciese un filósofo.
    Aspartámides viajó por el mundo antiguo y documentó todo lo que veía. De hecho todo el mundo se reía de él pues iba pluma y pergamino en ristre, pidiendo a la gente que le permitiese usar su espalda, como improvisada tábula para escribir todo aquello que se le ocurriera pudiese ser de interés. Particularmente era conocido en la costa por sus discusiones con los pescadores con los que tenía que regatear constantemente el precio del calamar del cual extraía la tan codiciada tinta. Un día llego a clamar:
-¡un dia inventaré un tubito fino con punta metálica que venga con su calamar incorporado, con el que pueda escribir indefinidamente y pueda prescindir de vosotros mentecatos!- a lo que los pescadores respondieron con risotadas. Siglos más tarde un húngaro llamado László József Bíró atendiendo a esta pequeña nota histórica metió varios calamares en un tubito de cristal y consiguió escribir. Después y habida cuenta que era dificil de meter los calamares, los sustituyó por un depósito de tinta cilíndrico e inventó el bolígrafo.
    De aquél periodo se le atribuye la escritura de un pergamino llamado "una Hélade en la mochila", "La guía Sandalín para viajeros", y el famoso "tabernatheo gastronomei espartanii",  en el que se analiza con detalle los usos gastronómicos de la región, que por ser espartana exhibía una dieta más bien escasa, por lo que el tratado se pudo escribir en una cuartilla ,es decir con un pergamino hecho con la piel de una ardilla.
    En ese periodo conoció y fue adoctrinado por el famoso Homero el cual ciego que era, le adoptó como pupilo a cambio de sus servicios de lazarillo, mejorando así su habilidad y estilo literario. La relación con el sabio era difícil dado su carácter arisco y agresivo, amén de que nunca le daba lo bastante de comer y por eso Aspartámides andaba siempre hurtándole el queso, los mendrugos de pan y el vino. Además como buen calígrafo escribía lo que el rapsoda Homero le dictaba.
    Cierto día que Aspartámides se había cansado de las crueldades de su mentor le dijo; -maestro estoy listo,¿ que debo escribir?- y Homero le contestó:
Aspartámides quedó pensativo y escribió:
“Al incauto lector. Mi nombre es Homero Simpsonides y soy un personaje amarillo. Me gusta estar sentado todo el día encima de un jergón de cinchas, con asiento y respaldo, viendo un espejo májico con el que se ven cosas y personas. Trabajo en un sitio en el que se extrae “energeia” de la materia y estoy casado con una mujer con una torre azúl sobre su cabeza cual faro de alejandría. Tengo tres hijos y de vez en cuando estrangulo un poco al mayor de ellos. Como ves estoy mal de la “psike”. Por favor átame una cuerda al cuello con una piedra y arrojame al Egeo”
    Después de aquello abandonó al cieguito el cual al entregar el escrito a su editor sufrió un percance marítimo del que se desconoce si salió vivo. Poca gente sabe que este último relato Homérico inspiró a un dibujante de comic loco llamado Matt Groening 23 siglos después , creando unos personajes que le harían millonario.
    Después de aquello marchó a pérgamo, más que nada a buscar pergaminos, puesto que en contacto con la magnífica creatividad de Homero se le ocurrió a él una "tragedia" futurista en la que en una aldea unos monjes de una religión ficticia caracterizada por el símbolo de una cruz promoverían la construcción de un macro-templo a la que llamarían "Cathedralimpos" usándo los conocimientos de un maestro constructor, y de su familia que serían los auténticos protagonistas. Pensaba llamarla "los pilares de la Gea". Desgraciadamente nunca llego a verse dicha tragedia aunque si sus notas, que al parecer cayeron ya en el siglo XX, en manos de un escritorzuelo inglés del tres al cuarto apenas conocido; un tal KET FOLLEN, o algo así se llama.
    Durante su trayecto iba alimentadose gratis en las tabernas a costo de entretener a la afluencia con sus cuentos. Recitaba de memória la Ilíada que tantas veces había reescrito por mandato de Homero, y cuando tenía al personal embelesado con el momento cúspide de la batalla de Troya, entonces hacía una pausa pidiendo vino y comida para su debilitado cuerpo de caminante, antes de concluir la historia. Naturalmente y dado que era tan buen orador lo agasajaban con vino, cordero, pan e incluso mujeres, aunque estas últimas solía rechazarlas arguiendo que le producían acidez.
    Al parecer se indispuso  y fue llevado ante el "Therapeutes" Galeno, este es un fragmento de la conversación que plasmó meses después:
Aspartámides:-Doctor tengo un fuerte dolor de oído y la cabeza me explota
Galeno:-dejame examinarte, joven...a ver...ya veo...lo que tienes es una fascitis plantar
Aspartámides:-¿y me duele el oído?
Gal:- es una fascitis plantar de oído, ¿no me crees? te lo juro por hipócrates (al parecer ese era el nombre de su maestro y se pasaba el día jurando por su memoria. A aquello se le llamo después juramento hipocrático)
Asp:-no es que no lo crea, pero alguna lógica ha de tener esto ¿no?
Gal:- Por supuesto, el espíritu reside en el hígado, en el corazón y en el cerebro, cada uno de estos tres anima las virtudes de órganos distintos y mueve una bilis distinta, tu bilis negra se ha mezclado con tu bilis roja y ha dado bilis marrón, que las venas han confundido y han pasado a una arteria diferente que llega hasta el oído por eso patear caminos te está dejando sordo
Asp:-yo no me estoy quedando sordo
Gal:-pero cada vez que te gritan ¿a que te vuelves patizambo?
Asp-no sabría decirle...... es igual, dígame el tratamiento...
Gal: ve al Pharmatheo y que te vendan una libra de "phanticos"  (una mezcla apartes iguales de belladona, melissa, pasas de corinto y vino)
Asp:- Agradecido Doctor, dígame que le debo...
Gal:- quinientos tetradracmas de nada jovenzuelo -(unos 200 euros de hoy al cambio)
Asp:-¡quinientos!- gritó asustado, y no era para menos por que solo llevaba un par de siclos, de lo que devino en que se convirtiera en asistente de cámara del Doctor Galeno para pagar su deuda, algunos dicen que asistente de cámara.......y de cama; puesto que los sabios viriles con rostros duros cual estatuas de marmol no causaban acidez a Aspartámides. En cualquier caso en ese momento aprovechó para conocer lo necesario sobre la ciencia médica, saber que incorporó al mucho que ya poseía. Durante aquella etapa pudo aprender de la medicina:
1-que en el Pharmatheo siempre atiende un primo del doctor.
2-que todos los tratamientos sea cual sea el nombre llevan una mezcla a partes iguales  de belladona, melissa, pasas de corinto y vino
3- que ante la duda de un paciente se recita el juramento hipocrático
4-si te piden explicaciones haz uso de la creatividad y cuenta lgo incomprensible traído de los pelos
5-que si cobras un pastón la gente se cura milagrosamente con tu medicina y explicaciones, y que los honorarios se piden sin asomo de duda ni temor ade ser inmerecidos
6-que todo ello te convierte en un gran profesional de la salud
    Se cuenta que un día Platón fue a visitar al médico y vió al joven Aspartámides con sus enormes ojos azules, sus labios sensuales y su torso griego, y en un descuido de Galeno le susurró que le adoptaría como médico particular doblándole la paga. Puesto que Galeno no pagaba nada, aceptó, y se marchó al oscurecer como  ladrón en la noche,  sobre todo porque le robó el instrumental a Galeno; reuniéndose con Platón extramuros.
    Pronto descubrió que lo que Platón quería realmente era "jugar a los médicos" con él, pero no le importó por que Platón tampoco le causaba acidez....y además le enseñó muchísimo de filosofía. Platón era un hombre sabio y algo rudo que también hacia juramentos ...."¡por la cicuta de Sócrates!" solía decir cuando se soliviantaba. Por otro lado podía ser muy delicado al filosofar en la intimidad.
    Aspartámides adaptó una metáfora de platón llamándola "el mito de la taberna" en la cual unos borrachos en una taberna ven el mundo de un modo muy concreto, y como uno de ellos por arte y gracia divina de momento, queda sobrio y sale de la taberna viendo un mundo nuevo totalmente distinto, pero al volver al interior de la taberna y tratar de explicar a los borrachos su mundo "sobrio" no puede hacerlo.
     Platón montó en cólera al leer su "mito de la caverna" transformado, y por la manía de Aspartámides de llevar chapas en la toga con la leyenda " si sodomas ponte la gomorra", y ese fue el fín de su periplo juntos, ya que aspartámides también reprochaba a Platón, estar siempre en su "mundo de las ideas"
     Siguió viajando y conoció a un tal Antipatro de Sidón, el cual le habló de las siete maravillas del mundo antiguo, animándose Aspartámides a visitarlas todas y describirlas. Con Antipatro intercambió ideas y formulas contra la acidez.
    Visitó tantos paises y era tan pésimo al datar sus textos que se ignora cual fue su ruta,  pero si se sabe que en la Alejandría de los Ptolomeos se percató y documentó de la cantidad de urinarios publicos instalados por doquier; que amén de lo precioso que era el faro portuario, era una locura deslizarse ladera abajo de las pirámides con una tabla, etc.
    Que al parecer el famoso coloso de Rodas bajo cuyas piernas pasaban los barcos, estaba muy bien reproducido en piezas giantes de piedra al mínimo detalle, incluso debajo de sus faldas, cuya vista todos los marinos evitaban mirar salvo Aspartámides que quedó maravillado.
    Que el templo de Artemisa de Efeso era una preciosa obra de ingeniería (que curiosamente fue ordenada destruir siglos mas tarde por un tal San Nicolás, simpático obispo que regalaba juguetes a los niños en navidad).
    En fin, Conoció a Herodoto , pitágoras, Euclides, Plinio, Onassis y a Mikis Teodorakis, compartiendo remedios contra la acidez con varios de ellos, amén de conocimientos varios. Visitó todos los pueblos de la antigüedad, los Asirios , babilonios, medas, Persas, filisteos, caldeos, israelitas, egipcios, numidas  siculos, Albacetenses, Matoleros, etc, documentando todo sobre ellos. Al final de sus años llevaba un carro con miles de pergaminos sobre su saber y sus viajes, con el que volvió a Egipto a depositarlo todo en la biblioteca de Alejandría.
    De lo demás no se sabe, que perdió vista y se pasaba leyendo el día en la biblioteca pegado a un candil encendido, del cual intentó extraer aceite junto con su asistente, no se sabe para qué, cayendo y originando un fatal incendio es solo un rumor. Que se rumorea también que el aceite de tea era un componente esencial de los "remedios contra la acidez" a las que tantas alabanzas dedicaba. En fin, fuese como fuese queda patente la figura de este literato antiguo con tanta relevancia y hasta ahora casi desconocido.

Glutth Eohgordo

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